La literatura no es solo cosa de adultos ni de niños grandes
que sepan leer. Es recomendable que los más pequeños manipulen cuentos desde
que son capaces, físicamente, de hacerlo.
El cancionero infantil es una pieza fundamental de la educación
poética del niño/a desde que nace hasta los 7-8 años. Al principio las nanas, las
canciones infantiles, los juegos con las partes de su cuerpo, las rimas, los versos
cortos acompañados de gestos, iniciarán a los niños en el mundo de la literatura. Otras fuentes de estímulos visuales, táctiles y
auditivos, como los cuentos de tela, con diferentes texturas y mecanismos
sonoros, o los cuentos para el baño… también invitarán a los niños a adentrarse en este maravilloso mundo.
En estos momentos es imprescindible la ayuda directa de un
adulto. Su voz acompaña y enriquece las ilustraciones, llevando a los niños a descubrir el deleite que brindan los libros, antes de pedirles que desarrollen destrezas lectoras. Así se sentirán cada vez más atraídos por los cuentos y la literatura en general.
Siempre tendremos en cuenta utilizar el material adecuado al momento evolutivo de los pequeños/as, a su forma de ser y a sus gustos. Utilizar cuentos inapropiados para la edad de nuestros niños provocaá que éstos pierdan la atención y el interés por descubrir más sobre ellos. Es imprescindible siempre seguir el ritmo que nuestros alumnos o hijos nos marcan.
El formato de los cuentos será, en un principio, con pocas
páginas, y éstas deben ser gruesas, para que los niños puedan pasarlas con
facilidad. Los primeros cuentos deben contener imágenes aisladas de objetos
fieles a la realidad y pertenecientes a su vida cotidiana. Más adelante podremos añadir imágenes de situaciones con diversos personajes, para llegar a las
historias con introducción, nudo y desenlace y a los cuentos que incluyen
texto.
Ofreceremos a nuestros pequeños una buena gama de cuentos para que escojan el que más les guste en cada momento. Debemos permitirles que se tomen su tiempo para escoger el que prefieran y para mirarlo individualmente.
Estas son algunas estrategias que podemos utilizar, como padres o educadores, para favorecer el aprendizaje de la lectura:
- Contar o leer cuentos en voz alta.
- Finalizado el relato se puede conversar con los niños/as sobre el mismo, realizando ejercicios de comprensión lectora: qué fue lo que más les gustó o desagradó, quién es su personaje favorito, cómo les pareció la reacción de determinado personaje ante cierto hecho, cómo hubieran actuado ellos ante una determinada situación, etc.
- Cantar canciones ayudándonos de láminas con dibujos.
- Recitar poesías en voz alta y ayudarles a aprenderlas.
- Dramatizar cuentos.
- Es recomendable disponer de un lugar dentro de la casa para la lectura, donde se encuentren los libros, haya un ambiente tranquilo, cómodo y bien iluminado. Si se pudiera, también sería favorable tener un momento de lectura fijo cada día.
- Acompañar a los niños a librerías y ayudarles a elegir los libros que leerán.
- Ir junto con los pequeños a la biblioteca a leer y participar de actividades culturales relacionadas a la lectura infantil.
¿Qué más estrategias se os ocurren?